Kalabrese, el simpático Rumpelzampano de Zürich, está de vuelta con 11 canciones que se meten debajo de tu piel y van directas a tus caderas. Justo un año después del lanzamiento de "Let Love Rumpel Part 1", su continuación finalmente está con nosotros. El resultad es quizás menos pop pero más trippy y flotante, recordando por momentos su álbum debut "Rumpelzirkus". Sonidos baleares y Kalafunk masivo. El álbum lleva en sus surcos el inconfundible sello de Sacha Winkler, que no se cansa de explorar y experimentar con su música, desarrollándolo constantemente e impulsando sus sueños y visiones más allá de la música. El álbum no es para nada agotador, se desliza con facilidad y deja algo de espacio, como una perfecta Panna Cotta o una copa de Merlot.