2020 Lovemonk
Maravilloso trabajo que muestra el inmenso talento de Buscaglia, un personaje clave en la escena musical contemporánea del cono Sur. Algunos apuntes del propio artista a propósito del disco: “El disco fue grabado totalmente fuera del ordenador; o sea, todo lo que suena fue efectivamente tocado, lo cual incluye efectos, máquinas de ritmos y programaciones. Algunas fueron armadas con combinaciones de presets de teclados tomados con micrófonos aéreos, otras haciendo finger drumming y otras usando samplers prehistóricos.”Buscaglia, reconocido guitarrista, en este disco sin embargo opta por el piano y la percusión: “Mi approach para tocar el piano oscila entre Bola de Nieve con la peste bubónica y Hugo Fattoruso insolado en la Kon Tiki.”Y apostilla: “Muchos se confunden y piensan que uno primero tiene que tocar mal, para después llegar a tocar bien. En realidad el músico tiene que tocar bien, para luego de eso poder llegar a tocar más allá del bien y del mal.”Con respecto a sus influencias: “La mayor influencia musical para este disco fueron los tres años saliendo al aire con mi programa “La Casa del Transformador” (Gladys Palmera 2016/18), esas emisiones fueron acentuando un ánimo isleño y selvático.”Sobre producción y arreglos: “Los arreglos del disco dan por hecho que en el siglo 21 ya un melómano no necesita escuchar todos los instrumentos que las convenciones indican que deben formar una canción. Se ciñen al concepto de “banco de tres patas” acuñado por Tom Waits. Esto es: “Los bancos se suelen hacer con cuatro patas, pero si con tres ya son firmes y te pueden sostener, dejalo así.”El álbum cuenta con una nómina impagable de músicos, sin embargo no hay en el disco invitados “famosos”: “Cómo bien nos enseña Hollywood, cuantas más estrellas actúan, más probabilidades de que la película sea un refrito innecesario”. Así que el artista ha optado por la sobriedad, “el único invitado célebre podría ser Milán Cardozo, arpista paraguayo de 80 años que vive en la selva misionera, quien colabora en un par de canciones con el arpa que él mismo se construyó”.Pese a todo lo anterior —o precisamente por eso— “Basta de música” es un disco que sorprende y deslumbra.